29 ene 2009

¿Quién exige más a la hora de buscar pareja?

Escrito por: Miguelina Terrero
Las mujeres son más exigentes que los hombres a la hora de buscar pareja, según un estudio realizado por un destacado profesor de la universidad de Sao Paolo, en Brasil, cuyos resultados podrían coincidir en cuanto a las cualidades que desea cada persona de la pareja que busca, en cualquer país del mundo. “El profesor, experto en hacer trabajos de investigación y encuestas, hizo un estudio, tomando una muestra muy significativa, entre hombres y mujeres en las edades de 17 a 55 años, donde estuvieron representadas todas las clases sociales, buscando determinar las cualidades más buscadas y apreciadas, al elegir un compañero o una compañera”, cuenta la psicóloga clínica Nery Estévez. La especialista en orientación y consejería, analizando los resultados de la mencionada encuesta, explica que la investigación arrojó que aún para una relación pasajera, los hombres prefieren mujeres inteligentes, antes que mujeres sexys.
El otro dato relevante fue que las mujeres son aún mucho más exigentes que los hombres a la hora de buscar pareja. “Esta encuestra mostró, en el caso del hombre brasileño, que éste, a la hora de “sentar cabeza” con una mujer, busca las siguientes cualidades, ubicadas en orden de preferencia: inteligencia, sinceridad, bonita, esforzada, sexy, comprensiva, elegante y gentil”, detalló la profesional. Al preguntársele a las mujeres, cuáles creían ellas que eran las cualidades más apreciadas o buscadas por los hombres, respondieron según el orden siguiente: sinceridad y honestidad, comprensión, inteligencia, esforzada, elegante, gentil y atenta. A ambos sexos se les preguntó, cuáles creían ellos que serían las cualidades negativas que podrían llevar al rechazo. El orden de las respuestas fue: falta de inteligencia, falta de higiene, vulgaridad, diferencia de nivel social, egoismo, corrupción, grandes diferencias de edad, defectos de la apariencia, fumador o vicioso y condición socio-económica. Posiblemente, encuestas semejantes, hechas en otros países, pudiesen arrojar resultados diferentes. Estévez analiza que “si vemos las cualidades, podríamos asumir que son deseables en cualquier ser humano, sin importar su lugar de origen. “Los hombres saben apreciar muy bien la diferencia entre una cara bonita cabeza hueca” y una verdadera mujer, inteligente, con valores morales y buena formación.

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