Leonel Fernández no tomará ninguna medida impopular para beneficiar al gobierno que presidirá Danilo Medina a partir del próximo 16 de agosto. Esta afirmación es sustentada por los analistas que trabajan para Noticia Libre. com en el hecho de que el presidente saliente está montando ahora la campaña para su regreso en el 2016 y parece que no está dispuesto a pagar en el futuro el precio de una medida que pueda dañarlo en su propósito político de regresar al Palacio Nacional dentro de cuatro años.-
Temístrocles Montás, Ministro de Planificación y Desarrollo, dijo recientemente que la reforma fiscal integral que a su criterio necesita el país debe realizarse después que se juramente Danilo Medina, en el periodo de agosto a diciembre del presente año. La lectura de estas declaraciones de Montás indican que Leonel Fernández se habría negado ha promover la iniciativa durante el periodo de transición, porque históricamente ese proyecto impositivo sería calificado como la sexta reforma fiscal de su gobierno, con la consecuencia negativa que eso implica para el final de su mandato.
La forma de pensar del Presidente Leonel Fernández sobre ese tema fue totalmente diferente en el 2004, después de su victoria electoral, porque en esa oportunidad le solicitó al presidente saliente, Hipólito Mejía, que le sometiera al Congreso Nacional un proyecto de reforma impositiva que sus técnicos consideraron necesario para recuperar la economía nacional, después de la crisis bancaria que afectó el país. Con ese paso, que contó con la mediación de Agripino Núñez Collado, el gobierno entrante quedaba liberado de una medida muy controversial en los mismos inicios de su administración. Ahora parece que ha cambiado de opinión porque no le hará el favor a Danilo de quedar exonerado de iniciar su gobierno sin pagar el precio de las medidas impopulares en los mismos inicios de su gobierno.
El Presidente Fernández manifestó la semana pasada que la victoria del PLD fue un reconocimiento a su gobierno, en una opinión que fue interpretada como una forma de restarle méritos al candidato electo. Un deterioro de las relaciones entre las dos principales figuras del partido oficial genera mucha preocupación entre los sectores productivos del país porque la vicepresidenta electa es la esposa de Fernández, con toda la consecuencia que eso significa para la buena marcha del Estado Dominicano.noticialibre.com
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